Hace un par de meses tuve la suerte después de mucho tiempo buscando una sacapruebas por todas las imprentas de mi zona y páginas web de anuncios de compra-venta de cosas de segunda mano de encontrar una.
Cuando la recibí después de la emoción, y de ver en las condiciones que venía me puse manos a la obra, para darle lustre y quitarle el olor a grasa vieja y polvo que traía.
Sorprendentemente el cacharro traía sus instrucciones, y nose trata de un "sacapruebas" al uso, sino de una rotuladora, que se usaba en los negocios a principio del siglo XX, para confeccionar las ofertas.
Me puse manos a la obra, y limpié con gasolina la máquina que eso si, funcionaba perfectamente.
Y los tipos uno a uno, con una brocha suave y gasolina y luego las lavé, las sequé...
Y el mueble le hice un tratamiento contra la polilla, después de meterlo un día y una noche en el congelador. Y le dí con Pronto de Jhonsons para maderas.
El sistema de sujetar los papeles, los traía rotos, el óxido había corroído los hierros, y después de mucho darle al tarro pensando como arreglarlo se me encendió la bombilla, y usé unos clip antiguos de archivar papeles. Probé los plateados pero eran muy blandos, y luego probé los dorados y estos si que me sirvieron.
Luego me apetecçia probar los tipos y los coloqué en orden alfabético sobre la sacapruebas.
Y los entinté. Es curioso el sistema de composición con unas varillas que se colocan en unas ranuras, y a la vez los tipos traen una ranura para colocarlos y unas pequeñas pinzas para ajustarlos y que no se muevan.
Este es el resultado.
La única pena es que solo da para tamaño folio, no es demasiado grande, pero es una máquina super y singular.
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